En el antiguo reino de Castilla se produjeron en la Baja Edad Media un conjunto de relaciones personales, sociales, económicas e institucionales que dieron lugar a una serie de cambios y entraron en conato con la posible feudalización, los señoríos y los intereses nobiliarios laicos y eclesiásticos.

El autor describe la evolución histórica de Castilla estudiando hechos relevantes como la primera guerra civil, la subida al trono de la nueva dinastía Trastámara y su evolución, la organización del Estado, las difíciles relaciones entre la monarquía y la Iglesia, la reforma del clero o el protagonismo de las Hermandades, las Cortes y las ciudades.

Con el advenimiento al trono de los Reyes Católicos surgen en los reinos hispanos nuevas formas de gobierno y, sobre todo, una innovadora construcción político-administrativa de corte moderno y de intenciones nacionalistas. Todo ello en consonancia con la incipiente mentalidad renacentista y los profundos cambios de circunstancias, situaciones y realidades operadas en Europa y, también en España, especialmente en el orden económico administrativo y social, cultural, religioso, militar, hacendístico y comercial.

En este libro también se analizan y describen las transformaciones de las coyunturas propias de este contexto histórico entre la Baja Edad Media y la llegada del Renacimiento, que los Reyes Católicos realizan con la implantación de las bases de lo que fue la creación de un Estado moderno y nacional en el marco de una monarquía autoritaria e Hispánica.