Miseria planificada
derechos humanos y neoliberalismo
- ISBN: 9788494892271
- Editorial: Dado Ediciones
- Fecha de la edición: 2019
- Lugar de la edición: Madrid. España
- Colección: Disonancias
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 22 cm
- Nº Pág.: 403
- Idiomas: Español
El libro, una tesis doctoral modificada de reciente lectura, supone una superación del sentido común sobre los derechos humanos, planteando la necesidad de un análisis histórico y un abordaje desde “los de abajo” a partir de las raíces causales de sus violaciones. No parte de criterios iusnaturalistas sino de la crisis de la modernidad (Lukács, Escuela de Frankfurt) y de ahí el título de miseria planificada como una caracterización del neofundamentalismo de nuestro tiempo. Acomete asimismo una crítica epistemológica a partir de Wendy Brown, Peter Singer y Charles Taylor, relacionándola con los movimientos sociales alternativos y la contracultura. Considera en todo caso el moralismo político altermundialista como una señal clara de impotencia política. Asimismo, plantea una aproximación transdisciplinar no centrada exclusivamente en las ciencias jurídicas, interdisciplinar y transacadémica aunque no descuida ni mucho menos la vertiente académico-universitaria, lo cual se plasma en un despliegue abundante de citas.
En cuanto a los aspectos de la antropología filosófica considera el estatuto especial de los derechos humanos pero informado por la biología y no sólo la jurisprudencia. Citando entre otros a Nancy, evita la superficialidad de la filantropía y el humanismo emotivista, para adentrarse en los estudios sobre la vulnerabilidad, el sufrimiento y la finitud.
Desde el punto de vista histórico crítico, los derechos humanos entroncan ante todo con la ruptura y crisis de la modernidad, planteando brevemente la situación del orden premoderno y el paso al orden moderno capitalista y sólo en su seno tienen lugar aquellos. Se trata pues de un análisis comparativo con especial incidencia en la contextualización histórica material, superando en lo posible todo tipo de carácter universalista. En efecto, apuesta por una antropología filosófica intercultural que permita articular un debate sobre tales derechos humanos, tomando a Taylor como una referencia fundamental, así como el giro lingüístico y los procesos de legitimidad tardomodernos como hitos importantes. Otro elemento relevante estriba en recomponer la dimensión esotérica de la política, su aspecto mítico y cuestiona la concepción normal de la política como puro ejercicio de gestión. Un ejemplo se basa en seguir la filosofía de la liberación latinoamericana (Dussel, Castro Gómez, Scannone) y su consiguiente superación del eurocentrismo.
En cuanto a la confrontación de los derechos humanos y el neoliberalismo, parte del lenguaje de estos últimos y su reflejo en la política de lo real, subrayando las paradojas que suponen los derechos (malentendidos, distorsiones y limitaciones) incluso en términos lingüísticos (oposición de lo real y lo simbólico en Zizek). Ello sirve para superar las categorías hegemónicas de la ética y la política como formas universales y abstractas, insistiendo en la crítica que entre otras plantea Arendt sobre el nacimiento de la representación abstracta del derecho, pero también convoca a otras autoras como Butler en este proyecto de investigación contemporánea. Cabe preguntarse en ese sentido si los derechos humanos son eficaces para la lucha de los excluidos, los discapacitados y los explotados o más bien dificultan esa lucha cuando la mayoría de la población en realidad no es objeto de tales derechos.
Interesa también la puesta al día de la ontología social y la antropología filosófica del concepto de derechos humanos con una prolija discusión historiográfica en torno al “perennialismo” y el “excepcionalismo”. Respecto a la primera concepción, el autor se retrotrae a las formaciones premodernas, con diferentes tradiciones religiosas, filosóficas y culturales, utilizando las obras de Leo Strauss, Herskovits y Geertz en forma de crítica contra el relativismo y el antirrelativismo. Los derechos humanos no han sido descubiertos en occidente, más bien inventados a través de una genealogía de la identidad moderna. En lo que respecta a la crítica de la normatividad excepcionalista, el autor subraya el metarrelato de la expresiónderechos humanos como dispositivo político e indaga en sus consecuencias. Por último, nos sitúa en la poshistoria, ese tiempo que resta, centrándose en el ámbito metropolitano y cosmopolita a partir de autoras como Saskia Sassen.
En cuanto al sujeto jurídico y el orden simbólico del derecho, se cuestiona la progresiva asunción de una férrea legalidad como definición del sujeto. Cabe añadir que los conceptos de la teoría moderna del Estado son conceptos teológicos secularizados (Schmitt). Así, el fundamento de la vida política no es tanto la legítima razón del orden, sino la legítima voluntad del legislador (Foucault) y de ahí la crítica de los modelos contractualistas y utilitaristas. Interesa en este sentido la introducción de los criterios de raza y género en la negación inicial de esa fundamentación contractualista-utilitarista de los mismos derechos, y la lucha consiguiente por la nominación que acontece en todo suceso jurídico. Se añade la pregunta por la condición del homo sacer (Agamben) en el nuevo orden moral de la modernidad, evitando el universalismo esencialista. Con Balibar se reconoce la dificultad de una soberanía planetaria que no se base en la “igualibertad” propiamente socialdemócrata, pero tampoco en tesis revisionistas como las de Moyn, y por último, se discute la versión neokantiana de David Held.
En este sentido, planteando la contradicción entre los derechos humanos y el modelo neoliberal (¿qué tipo de relación puede establecerse entre los derechos humanos en su formulación transnacional y la ideología del fundamentalismo de mercado o neoliberalismo?), se convoca a toda una pléyade de autores (Badiou, Wendy Brown, Laval y Dardot, Arendt, Honneth, Klein, Sloterdijk) acentuando el activismo de los derechos humanos frente al culto neoliberal del miedo (riesgo) y la precaución. En suma, se apuesta por una nueva epistemología que permita desertar de las interpretaciones superficiales, esencialistas y occidentalistas de los derechos humanos.
Finaliza, a modo de epílogo, con un análisis de la carta abierta de Rodolfo Walsh a la Junta Militar argentina como un contrarrelato ante el Estado.