La restauración representa, de entre los distintos tipos de Intervención a los cuales pueden someterse los bienes culturales, probablemente el más complejo y uno de los de mayor Importancia, ya sea por la Incidencia que tiene sobre el elemento intervenido como por la dificultad y el interés de los interrogantes que se suscitan en el seno de su disciplina. Sin embargo, el ya secular debate en torno a esta figura ha sido afrontado desde la perspectiva de lo jurídico tan sólo en los últimos decenios, bajo el impulso de su creciente protagonismo en el ámbito de la tutela de los bienes culturales: la particular complejidad teórico- práctica que reviste su disciplina, la polémica que en no pocas ocasiones acompaña a su puesta en práctica o las considerables sumas de dinero que la misma implica son algunos de los factores que han actuado en modo determinante en la efectiva emanación de una regulación específica y a la consolidación de una intensa intervención pública sobre el sector. Este renovado interés presente en la esfera del estudio jurídico ha sido espoleado en nuestro país por una serie de casos -entre los cuales destaca notablemente el de la intervención practicada en el Teatro romano de Sagunto- en los que la controversia generada ha terminado en los Tribunales, dando lugar a nuevas reflexiones y posicionamientos con respecto a los contenidos de la normativa de Patrimonio Histórico en materia de conservación y restauración de bienes culturales. Este trabajo contempla la restauración desde un análisis doctrinal de carácter jurídico, pero esta vez mediante una aproximación unitaria, autónoma y profunda sobre la cuestión.