Las Instituciones de Gayo constituyen en la acutalidad un material excelente para los estudios del Derecho Romano por la claridad de su exposición, la precisión de los conceptos y la serenidad de juicio que revela su autor.

Es indiscutible que sin una visión adecuada de las creaciones del genio jurídico de Roma se hace muy difícil alcanzar una válida formación en Derecho. Así fue entendido desde la antigüedad, ya que la obra de Gayo era utilizada por los alumnos que iniciaban su aprendizaje de juristas hace más de quince siglos en la ciudad de Constantinopla.

El autor, de quien se desconoce su origen, su personalidad en incluso su verdadero nombre, realizó una ingente labor de sistematización jurídica, siendo su Instituta la única obra clásica que ha llegado hasta nosotros casi completa.

Agotadas hace tiempo las escasas versiones al castellano del manual de Gayo, esta nueva versión bilingüe repone un notable complemento básico a la bibliografía utilizable por los estudiantes, a quienes principalmente está destinada.