Dir. Jesús Cruz Villalón. La normativa laboral, desde sus orígenes, ha tratado de buscar soluciones equilibradas y razonables que procuren las mejores condiciones de trabajo a quienes se incluyen en su ámbito de aplicación, fundamentalmente los trabajadores subordinados, sin olvidar el modelo de producción económica en el que éstos se insertan. En esta búsqueda, el dilema no sólo ha radicado en la identificación de la regla que se presupone más adecuada para la solución de la cuestión suscitada, sino también y, en un segundo momento, en la garantía de una aplicabilidad real de la solución técnicamente propuesta. Aplicabilidad real concebida desde dos perspectivas: desde la que se centra en la determinación de los instrumentos adjetivos destinados a conseguir el cumplimiento de la norma (Inspección de Trabajo, potestad sancionadora de la Administración, poder judicial, etc.), que puede denominarse de la efectividad normativa; y desde aquella otra, más completa y evanescente, sobre la que nos proponemos poner el punto de atención en esta monografía, de concreción de los ingredientes y elementos que debe reunir una disposición o política pública para que sus prescripciones o sus técnicas de actuación provoquen los resultados pretendidos sobre la correspondiente realidad social a la que se dirige, y que entronca con la búsqueda de la eficacia de la norma. Estas cuestiones son justamente las que constituyen el objeto del presente libro, en el que desde una perspectiva multidisciplinar se trata de indagar en las razones y mecanismos que permiten acercar y hacer converger la finalidad última de la norma con la realidad social resultante de su entrada en vigor.