La Fiscalía, ¿de quién depende?

Esta pregunta lleva dando vueltas históricamente en este país, incluso antes de que se pronunciara de manera tan directa en televisión por todo un presidente del gobierno. Si de verdad tiene interés en saber la respuesta creemos que este libro le ayudará a comprender la labor de una institución como la Fiscalía. No es un órgano fácil de definir. A veces se parece a un ornitorrinco, un mamífero que pone huevos, es venenoso, tiene pico de pato, cola de castor y patas de nutria.

La Fiscalía se integra con autonomía en el poder judicial, pero su cabeza visible, el Fiscal General del Estado, es propuesto por el gobierno. Aprobamos la misma oposición que los jueces, pero tenemos una organización jerárquica. Activamos la facultad de castigo que el Estado tiene para sancionar a quien comete un delito, pero a veces acudimos a los juicios solicitando que absuelvan a quien comparece como acusado. Nuestras funciones se desempeñan más allá del derecho penal y se extiende en todas las jurisdicciones.

Con este libro hemos pretendido acercar en un lenguaje alejado de los tecnicismos frecuentes en esta materia (aunque algunos han sido inevitables), una institución tan compleja como apasionante a todos aquellos que se sienten intrigados por nuestro trabajo del día a día.

El formato escogido es el de preguntas y respuestas, lo que en internet suele aparecer como F.A.Q. (Frequently Asked Questions: Preguntas frecuentemente formuladas). Para ello nos hemos ayudado de nuestros amigos y familiares que, ajenos al mundo del derecho muchos de ellos, a lo largo de los últimos años nos han preguntado sobre nuestro trabajo y funcionamiento para entender mejor lo que hacemos. Esperamos que con este libro traigamos algo de luz para comprender una institución demasiadas veces zarandeada.