La cerámica es uno de los elementos culturales más abundante en la vida cotidiana de la Antigüedad. El Gabinete de Antigüedades de la Real Academia de la Historia guarda, entre sus fondos cerámicos, una pequeña colección de cerámica romana denominada "Terra Sigillata", la cual se ha inventariado y estudiado en este libro, gracias al encargo del académico Dr. Martín Almagro-Gorbea, Anticuario Perpetuo de esta Real Academia. La cerámica romana que aquí se va a tratar es un producto que aparece en la producción y mercados romanos a partir de la mitad del siglo I a.C. Se trata de platos y vasos de superficies brillantes de color rojo, teniendo las pastas claras. La cerámica es un elemento director en todo yacimiento romano. Su estudio permite no sólo establecer las corrientes comerciales del lugar, sini también fijar cronologías, posibilita el trazo y sucesión de períodos, permite acercarnos a la vida cotidiana de nuestros antepasados.