Populismo es quizá la noción más asociada al estado actual de los regímenes democráticos tanto en América con en Europa. No obstante, en ambas regiones las reflexiones sobre el tema parecen correr por separado, dando la impresión de que el mismo término es usado para indicar un sinnúmero de experiencias no todo asimilables.

En esta investigación se evidencian las dificultades que han enfrentado los estudiosos por arribar a un consenso sobre los atributos recurrentes y comunes que distinguen a los fenómenos calificados con el nombre de populismo y/o populista, que justificaría englobarlos bajo una misma denominación.

El recorrido empieza en Rusia y Estados Unidos (de finales del siglo XIX), continúa por América Latina (de mediados del siglo XX y principios del siglo XXI) y termina en Europa de las últimas décadas. A través del análisis "contextualizado" de la noción de populismo, se trata de examinar aquello que los propios estudiosos han intentado vehicular al emplear una misma palabra, bajo la premisa de que el significado de un término no está esculpido en piedra (de una vez y para siempre), sino que está sujeto constantemente a las más diversas (re)interpretaciones y contiendas.

En la última parte se ofrece un análisis teórico sobre el binomio populismo-democracia, a partir de los distintos usos de populismo como categoría política, con el objetivo de contribuir al esclarecimiento conceptual, sin el cual toda reflexión sobre populismo y democracia corre riesgo de ser vana y estéril.