El estudio de los mecanismos de control de la corrupción utilizados por la monarquía hispánica ha conocido un renovado interés en los últimos años y, sin duda, constituye uno de los temas fundamentales en la historiografía modernista española. Este libro relata, precisamente, la historia de una visita de inspección realizada por Juan de Góngora a la Casa de la Contratación de Sevilla, despachada en 1642, que permitió sacar a la luz los principales problemas del sistema, múltiples delitos perpetrados que fueron en detrimento del funcionamiento de la Carrera de Indias y de la imagen de un Consulado de Sevilla patrimonializado por los grandes comerciantes de origen castellano, reacios a perder sus privilegios en el comercio indiano. La inspección vino determinada, pues, por un contexto de altos niveles de fraude en el comercio indiano debido, entre otros factores, al incremento fiscal que se produjo durante el valimiento del conde-duque de Olivares. Si bien es cierto que la visita supuso algunos cambios esenciales en la administración de la Casa de la Contratación y del Consulado de Sevilla, habría que esperar a la década de 1660 para que se produjeran cambios sustanciales en las instituciones y en el modelo de Carrera de Indias legado hasta ese momento. Con toda probabilidad esas reformas no habrían sido posibles sin la información emanada de la visita de Juan de Góngora, que influyó decisivamente en la institución sevillana para que los abusos y excesos no se perpetraran en lo sucesivo con tanta facilidad.