El presente trabajo tiene como objetivo general el describir las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas en el sistema de libre competencia aplicado al ámbito de la contratación pública, analizando en forma comparativa los regímenes de Uruguay y España.

La temática reviste gran relevancia en tanto el Estado, por su propia naturaleza, cumple un rol regulador, de control y fiscalización, mientras que por otro lado, participa activamente en el mercado, como oferente de bienes y servicios en ciertos casos, y en otros como demandante de los mismos, debiendo referir en esta última hipótesis, a la contratación pública.

Tal como señala la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (conocida por su sigla en español OCDE, y en inglés OECD), las contrataciones de bienes y servicios del Estado representan un alto porcentaje del Producto Interno Bruto (PBI) de cada Nación.

En diversos países, el Estado tiene un importante poder de compra, por lo cual debe destacarse su posición para fomentar la competencia e influir en los mercados, procurando incluso la introducción de nuevas tecnologías.

En virtud de ello, las decisiones que se adopten en materia de contratación pública pueden impactar significativamente en aras de promover la competencia en el mercado.

Es por ello que el análisis de la actuación de las personas públicas estatales como sujetos de la contratación pública adquiere una relevancia significativa. De esta forma se analiza en primer lugar la libre competencia y su regulación normativa, y posteriormente se aborda la temática referida a la contratación pública, con la finalidad de determinar la interrelación entre ambos temas y su alcance.

En conclusión, se pretende determinar si el Estado, que es quien debe fomentar y tutelar la libre competencia, constituye el mejor ejemplo de actuación en su obrar en la contratación pública.