Con este tercer volumen se cierra la clásica y monumental biografía de León Trotsky del historiador Isaac Deutscher. En ella abarca los últimos doce años del trágico personaje que está indisolublemente ligado a la historia de la Revolución Rusa.

Durante estos años se consumó la consolidación monolítica del régimen stalinista en la URSS. Con el exterminio de todas las oposiciones -trotskista, zinovievista y bujarinista- en el interior del país, el peso de la lucha ideológica contra Stalin recayó casi exclusivamente sobre el famoso desterrado. Fue, en las palabras del propio Deutscher, "como si un enorme conflicto histórico se hubiese resumido en un duelo entre dos hombres". Para explicar esto, el biógrafo de Trotsky analiza los acontecimientos sociales y políticos de ese período: la tumultuosa industrialización y colectivización en la URSS y las grandes purgas, el colapso del movimiento obrero alemán y europeo bajo el embate del nazismo, y cada uno de ellos ahondó y exacerbó su conflicto con Stalin, inspirando la mayor parte de su vasta obra polémica.

Deutscher se ocupa aquí, con mayor detenimiento que en los dos volúmenes anteriores, de la vida privada de su personaje. Porque en esta etapa, «la vida familiar de Trotsky es inseparable de sus vicisitudes políticas: confiere una nueva dimensión a su lucha y añade una sombría profundidad a su drama». Por primera vez, el relato de los hechos se basa en la correspondencia íntima de Trotsky con su esposa y sus hijos, contenida en la sección cerrada de los archivos que él mismo transfiriera, poco antes de su asesinato, a la Universidad de Harvard y que ésta pusiera a disposición de Deutscher con el consentimiento de la viuda. Quedan así definitivamente aclarados muchos de los aspectos menos conocidos -y a menudo deformados por el interés partidario o enemigo- de la última parte de la vida de una de las figuras más extraordinarias del siglo XX.