Toda reforma política debe indagar sobre cómo se construye la relación entre el espacio de la política y el espacio dedicado al ciudadano. Una reforma debe aspirar a amentar la capacidad del ciudadano de participar de forma autónoma en ele debate publico y político, concibiendo al ciudadano como sujeto de la democracia, esto es, como sujeto de decisiones autónomas.

Más participación en el espacio público y más eficaces mecanismos de control tanto para los poderes institucionales como facticos, requiere de más espacios para la política (y no de menos). Parafraseando a Gianfranco Pasquino “la democracia nace para que los votos tengan mas poder que el dinero… para ello, se necesita ampliar y no achicar los espacios de la política porque eso significa precisamente achicar la democracia”.

En Argentina, las reformas políticas y electorales, han surgido a partir de crisis en ele sistema político representativo aunque no siempre permitieron un debate público profundo e informado, plural, democrático, que incluyera todas o las mayorías de las voces.
El funcionamiento de las instituciones representativas y de las reglas en la competencia electoral, la participación política y la igualdad de género, los sistemas de votación y las nuevas tecnologías en los procesos electorales, la regulación de los partidos políticos y el financiamiento de la política, los derechos políticos como derechos humanos, la importancia creciente del derecho electoral como disciplina autónoma, los organismos electorales y la observación electoral son algunos de los temas que en este libro tratan los distintos autores y que pueden servir de guía a la hora de debatir una reforma política que aún está pendiente en la Argentina.