En este libro se narra la historia de los canónigos regulares en la Edad Media. De ella fueron partícipes autores como Ivo de Chartres († 1116), Gerhoh de Reichenberg († 1169) y los teólogos de la escuela de San Víctor de París, Hugo (h. 1096-1141), y Ricardo de San Víctor (h. 1110-1173). De la misma también formaron parte escondidas abadías erigidas en lugares especialmente desestructurados, cuya presencia apostólica contribuyó fundamentalmente a la fijación de la población y a la construcción de un mundo organizado. Geoffroy du Loroux († 1158) estableció algunos de los principios que nos ayudarán a entender de mejor forma la espiritualidad del clero regular. Por otro lado, es imposible explicar la Devotio actual sin conocer a canónigos como Jan van Ruysbroeck († 1381), Tomás de Kempis († 1471) y Johannes Busch († 1480). En la liturgia canonical destacó, principalmente, el monasterio regular de Marbach, en la región de Alsacia. Esta labor de investigación histórica forma un concepto, establece una definición, desde un plano en principio teórico, para entender la naturaleza de su ministerio y actividad en el interior y al servicio de la Iglesia; para más tarde delimitar los elementos característicos de esta forma sacerdotal y las diferencias que se constataron entre estos y los demás clérigos: seculares, mendicantes y monjes. El resto de la monografía trata de poner límites a todas las realidades eclesiales en las que se constantó esta diferente consagración apostólica, tanto en el continente europeo como en el Levante del Próximo Oriente bajomedieval.